Historia #3 - "Pensaba que mi vida no importaba"

"Pensaba que mi vida no importaba"

Es horrible cuando sientes que tu vida entera es tan mala que quieres que se termine. Lo sé porque he pasado por eso.

Cuando estaba en la escuela intermedia, sentía que no encajaba con los demás. Decir que estaba marginada es quedarse corta. Yo era aquella pequeña niña del fondo de la clase que a todos gustaba tirarle papeles. Yo era la niña de quien siempre se burlaban los  “de la lista de populares” porque no era tan buena como ellos. Y odiaba el sentimiento de ser rechazada.

Después de años y años de recibir burlas, ser atormentada con palabras de que nunca llegaría a nada, le temía a la escuela y a la gente por completo. Lloraba todas las noches antes de ir a dormir porque tenía grabada en mi mente que era fea y tonta. Pensaba que era un “cero a la izquierda”, y eso es todo lo que sería.

Las cosas iban tan mal que no quería vivir. Pensaba en el suicidio a toda hora, aun a los 11 años. Era solo un pensamiento al principio, pero después se volvió una solución. Pensé que nunca iba a tener que llorar hasta dormirme y no sería criticada nunca más.

Así que empecé a experimentar diferentes formas de suicidarme. Una noche, casi tuve que se hospitalizada, pero sobreviví. Siempre había algunos sentimientos que me impedían llevarlo a cabo. Yo sabía bien adentro que quería cambiar mi vida, pero estaba muy deprimida, y por un tiempo largo, no supe cómo cambiar.

No sabía que algo o alguien muy poderoso tomaría mi vida para hacerla diferente. Tendría que ser alguien como… como Dios. Yo no tenía una relación con Él, y dudaba que Dios o alguien más pudieran ayudarme, pero le di una oportunidad. ¡Mi “oportunidad” rápidamente se convirtió en mi respuesta!

Recurrir a Dios, en vez de a una pistola o un frasco de píldoras, para resolver mis problemas fue el comienzo de una vida absolutamente nueva para mí. Una vida son dolor y una vida con amor eterno.  Yo hablaba con Dios todas las noches y le pedía que me ayudara. Leyendo Su Palabra en la Biblia y asistiendo a una iglesia, aprendí que Dios me ama por quien soy, sin importar lo que otra gente diga de mí.

Dios me ayudó a ver que mi vida era importante porque Él envió a su único Hijo, Jesús, a la Tierra para salvar mi vida. Jesús murió para que podamos ser perdonados por los errores que hemos cometido, y esto me enseñó que yo también tengo que perdonar a los que me han lastimado. El perdón no vino fácilmente, pero fue la mejor manera de librarme del dolor.

Aquellos chicos simplemente no entendían. Y en vez de odiarlos, aprendí a compadecerme de ellos. Ahora sé que no soy un “cero a la izquierda” a los ojos de Dios. El me ama sin importar que me ponga o con quien salgo. El me ama por mí misma. Me siento muy bien con lo que estoy viviendo ahora. Solo me queda preguntarme ¿Por qué alguien tan grande amaría a alguien tan pequeño? Pero justamente eso es lo que tan asombroso de Dios.

Por: Julia Fernandéz
Tomado: Revista "Vida Extrema"

Asi como ella, te puedes estar sientiendo tú o alguien cercano a tí. Es dificil afrontar esta vida solos , todos los cambios cosas buenas y malas  que nos suceden hacen que muchas veces nos sintamos desesperados  y con ganas de huir, pero hoy Cristo nos  te dice que seas VALIENTE, No temas ni desmayes que ESTARÁ CONTIGO!! Tú vida le pertenece a Dios y eres enormemente valioso para EL, confía que su gran  y perfecta sabiduría  nos guiara por el mejor camino y superaremos cualquier miedo o duda que tengamos y situación que  nos encontremos.

CRISTO TE AMA!

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